miércoles, 4 de mayo de 2011

Vivir entre interrogantes

Preguntas. Preguntas miopes. Místicas. Opacas. Enfermas. Anfibias. Obtusas. Aéreas. Opuestas. Cautivas. Feroces. Banales. Altivas. Incautas. Crudas. Impares. Astutas. E infieles. Preguntas parásitas sin respuesta, que me han robado unos 4 kilos.

Ese es el resumen de mis últimas dos semanas. Ni “síes”. Ni “noes. Ni “no sabe / no contesta”. Solo un vómito de adjetivos calificativos inútiles, alguna excusa adolescente y un séquito de frases des-suboordinadas. Nada más. Sola yo con mi impotencia y sin munición. Justa de ironía y coja de aire. Con hambre de ganas y sin apetito.

A veces la vida es eso. Vida a secas. Y lo demás, eso que ocurre cuando no te giras, es el puñado de sal que nos crece dentro.